La singularidad y la excelencia son dos de las principales virtudes que adornan a los vinos elaborados en Dehesa del Carrizal, una de las pocas bodegas en España que ostenta la más alta calificación otorgada por la administración: Vino de Pago. Para obtener esta calificación es necesario cumplir con una serie de exigentes parámetros en todo el proceso de elaboración, así como un clima privilegiado y suelos singulares que aportan cualidades extraordinarias a sus viñas. La bodega Dehesa del Carrizal está situada en Los Montes de Toledo junto al Parque Nacional de Cabañeros, en el término municipal de Retuerta del Bullaque (Ciudad Real).
La bodega fue pionera (1987) en la plantación de viñedos de la variedad cabernet sauvignon en Castilla-La Mancha
Para conocer algunos aspectos interesantes de la bodega, charlamos con su director y enólogo Pierre Yves Dessevre. Nació en pleno valle del Loira, zona vinícola por excelencia, y desde pequeño siempre ha estado rodeado de viñas. Pierre Yves está consiguiendo, con humildad, esfuerzo y con el apoyo de un equipo comprometido al máximo, elaborar unos vinos sensacionales que están muy bien valorados. Nos cuenta que el año que ahora termina ha sido especialmente prolífico en premios y distinciones. Entre las más importantes cabría destacar los 95 puntos obtenidos por su vino Cabernet Sauvignon 2019 otorgados por la Guía Gourmet 2023 así como los 93 puntos que le han dado este año Peñín y James Sukling al Petit Verdot. Por su parte el Chardonnay 2021 ha conseguido 93 puntos en el prestigioso concurso Decanter 2023 y la añada 2019 del Colección Privada se ha situado en el Top 100 de los vinos españoles elaborada por James Sukling con una puntuación de 94 puntos.
Dehesa del Carrizal fue pionera en la plantación de viñedos de cabernet sauvignon en Castilla-La Mancha allá por 1987. Desde sus inicios, esta uva se adoptó muy bien al terreno, ofreciendo añadas de inmejorable calidad durante muchos años. Pierre Dessevre afirma que el de Dehesa del Carrizal es un cabernet único que no se parece a los que se hacen en Burdeos ni en Napa. También afirma que el petit verdot es otra variedad que se ha adaptado muy bien al terreno. En cuanto al chardonnay, el responsable de la bodega afirma que tiene una gran personalidad que lo hace diferente a los que se elaboran en Borgoña y en el Nuevo Mundo. Por último, el Colección Privada es un coupage complejo y elegante que integra a los mejores vinos de cada variedad.
Clima más fresco
El clima de la zona donde se enclava la bodega es algo más fresco que el La Mancha, al estar en una altitud de 850 metros sobre el nivel del mar. Las temperaturas nocturnas son más bajas lo que alarga el ciclo de maduración. Las viñas se sitúan en suelos pedregosos con un pH bajo lo que da una acidez que aporta un equilibrio muy interesante en los vinos.
En la actualidad, la DOP Dehesa del Carrizal cuenta con 26,4 hectáreas de viñedo en producción. Las variedades plantadas son cabernet sauvignon, syrah, merlot, tempranillo, petit verdot y chardonnay.
La producción anual de la bodega es de 140.000 botellas. Pierre Yves Dessevre afirma que para la empresa es muy importante que se vean sus vinos en el mercado nacional y regional. “Nos gusta -afirma- que nuestros paisanos disfruten de los vinos que hacemos aquí”.
Mercado nacional
El 60 por ciento de la producción se destina al mercado nacional y el resto a la exportación. En este segmento destacan los países de Europa, aunque también se extienden a otros lugares del mundo como China, Corea, Taiwán, Japón México, República Dominicana, Puerto Rico, Argentina y, últimamente Estados Unidos, país en el que el año que viene tendrán distribuidor propio.
Otra de las características de los vinos de Dehesa del Carrizal, que se pueden encontrar en tiendas especializadas y restauración, es su buena relación calidad precio. La añada de 2023 ha sido muy buena, pero algo más corta que las precedentes.
