La bodega cooperativa Tintoralba del municipio albacetense de Higueruela ha presentado recientemente «La Alquería» su nueva gama de vinos de garnacha tintorera, con la idea de potenciar su línea de producto embotellado en los próximos años. Para ello han contado con un experto en poner en marcha nuevos proyectos empresariales fundamentalmente en el sector vitivínicola, Juan Manuel de la Mata, que, entre otras, ya ha pasado por las bodegas castellano-manchegas Pago del Vicario, Quinta de Aves y el Grupo Terraselecta (Bodegas Mano a Mano y Venta La Ossa).
Todos ecológicos de garnacha 100%, son fruto de la nueva idea de negocio introducida por Juan Manuel de la Mata y han sido elaborados por Pedro Sarrión
De la Mata se incorporó a Tintoralba hace algunos meses y su nuevo proyecto fue ratificado por los trescientos socios que acudieron a la asamblea en la que se debatió el asunto. De la Mata afirma que los graneles de garnacha tintorera de Bodegas Tintoralba tiene una justa fama mundial. Sin embargo, el embotellado, ha sido, hasta ahora, un aspecto casi simbólico en la política comercial de la cooperativa de Higueruela, que vendía anualmente una media de 60 a 70.000 botellas de vino.
Tintoralba cuenta en la actualidad con 1.700 hectáreas del viñedo que aportan sus socios. De ellas 1.620 son de garnacha tintorera y solo 80 de syrah. La producción media anual es de diez millones de kilos de los que se obtienen unos siete millones de litros. El 98% se vende como vino a granel.
Actualmente, Juan Manuel de la Mata está creando una estructura comercial para crecer en ventas en España y aumentarlas en el extranjero. El equipo está compuesto por cuatro personas que van a poder contar próximamente con un espacio comercial en el propio viñedo para atender las visitas de clientes y compradores nacionales e internacionales. Hasta el momento, el principal cliente de los vinos de la cooperativa es Japón. La nueva línea ya está levantando expectación entre distribuidores muy especializados de España y de algunos países europeos como Polonia.
Plan de negocio
El plan de negocio de Juan Manuel de la Mata incluye la incorporación de una nueva gama de vinos, todos ellos elaborados con la variedad garnacha tintorera, y el cambio en la imagen tradicional de los que hasta ahora embotellaba la bodega de Higueruela.
Los dos nuevos vinos, presentados este mes de junio en la histórica sede de la DO Almansa, han sido el Tintoralba Piedras Coloradas y el Cerro del Buey Vino de Paraje. A estos dos les acompañará en octubre el tercero de la gama, Alquería de la Graja.
En el acto de presentación, al que acudieron una treintena de personas, además de Juan Manuel de la Mata, intervino el enólogo que ha hecho posible que estos vinos ya estén en el mercado, Pedro Sarrión.
El Piedra Coloradas es un vino 100% garnacha tintorera y ecológico con tres meses de barrica que posteriormente ha sido afinado en depósitos de hormigón subterráneos, procedente de viñedos situados entre 900 y 1.000 metros de altitud y enclavados en suelos arcillo calcáreos y arenosos que proporcionan un buen cultivo con producciones equilibradas, sin necesidad de regadío. La fermentación alcohólica se realiza en depósitos de acero inoxidable a 25º C entre 8 y 10 días. La maloláctica se lleva a cabo en barricas de roble americano de 225 litros.
Vinos de paraje
Por su parte, el Cerro del Buey, es un vino de paraje 100% garnacha tintorera elaborado de forma biológica. Procede un viñedo viejo de secano con formación en vaso situado entre 900 y 1.000 metros de altitud. El suelo es arcilloso calcáreo y arenoso, ofreciendo un cultivo extremo en secano.
Una parte del vino realiza la fermentación maloláctica y posterior crianza durante 6 meses en barricas de roble francés de 500 litros, permaneciendo en contacto con las lías finas para obtener la mayor suavidad y dulzura de los taninos. La otra parte se cría también durante seis meses en ovois (recipientes de fibra de poliéster) de 1.500 litros, donde se afinan sus aromas de fruta y acentúa el carácter graso en boca, aportándole suavidad. Finalmente, ambas partes se mezclan dando lugar a vinos muy estructurados, suaves en boca y con taninos que no son secantes ni herbáceos. Una vez ensamblados se clarifican y filtran de manera suave para ser finalmente embotellados.
Antes de Navidad, saldrá el tercer vino de la gama, el Tintoralba Alquería de la Graja, un vino de parcela, que tendrá una elaboración similar al anterior, pero sumará tres meses más a su envejecimiento en barrica y oboi, lo que le permitirá tener una mayor concentración de aromas y sabor.
Cultivo ecológico
Pedro Sarrión señala que desde la cooperativa Tintoralba, en la que ya venía trabajando desde hace tiempo, le encargaron tras la llegada de Juan Manuel de la Mata, la elaboración de una nueva línea de vinos con más carga frutal, sin mucha madera y que aguantara bien el paso del tiempo. El conocido enólogo albaceteño afirma que la situación geográfica de Higueruela, en zonas altas y con mucho viento, facilita mucho el cultivo ecológico, al tiempo que sus terrenos ofrecen las mejores condiciones para obtener lo mejor de la garnacha tintorera. Así, ha conseguido hacer un vino de pueblo, el Piedras Coloradas, que reúne todas las condiciones de frescura y características varietales que proporciona este tipo de uva: color, taninos y precursores aromáticos, entre otras. Finalmente, Pedro Sarrión afirma que también cumple la última condición que le plantearon. Es un vino longevo, que se conserva perfectamente durante, al menos, cuatro años.
Por su parte, para la elaboración de Cerro del Buey buscó viñedos más viejos en vaso, también cultivados de forma ecológica. Este vino tiene una crianza de seis meses, tres más que el vino anterior, con una crianza mixta entre barricas y obois.
Del Tintoralba Piedras Coloradas y del Cerro de Buey se han hecho 10.000 botellas. Del futuro La Alquería de la Graja se embotellarán 6.500 unidades.
Un millón de botellas
El horizonte que se han marcado Juan Manuel de la Mata es llegar al millón de botellas dentro de cinco años, de las que serían mayoría las que engloban la gama tradicional de la bodega más el Piedras Coloradas. Dejando una menor y más selecta producción para el Cerro del Buey y La Alquería de la Graja.
En estos momentos, la ingeniera agrónoma, Benita del Rey, que acompaña a la dirección técnica lleva a cabo trabajos de identificación de diferentes parcelas con el fin de elaborar en el futuro nuevos vinos. De garnacha, por supuesto.
NOTA DE CATA
TINTORALBA CERRO DEL BUEY. VINO DE PARAJE
Garnacha tintorera 100%. DO Almansa
En cata nos muestra un color violeta intenso. Aroma de frutas rojas maduras con notas balsámicas y salinas y notas tostadas de roble. Suave en boca, con acidez equilibrada, taninos dulces y sabrosos. Vino fresco muy versátil que acompaña bien a todo tipo de platos. Ideal para tapas o degustar solo. Recomendado para verduras, pastas, arroces, pescados y carnes. Temperatura de servicio y conservación entre 15º y 16º.
TINTORALBA PIEDRAS COLORADAS. VINO DE PUEBLO
Garnacha tintorera 100%. DO Almansa
En cata nos muestra un color violeta intenso. Aroma de fruta madura, fresco con notas tostadas de roble. Suave en boca, con acidez equilibrada, taninos dulces y sabrosos. Vino muy versátil que acompaña bien a todo tipo de platos. Ideal para tapas o degustar solo. Recomendado para verduras, pastas, arroces, pescados y postres. Temperatura de servicio y conservación entre 15ª y 16ª C.
 presentó hace unos días en la sede de la DO Almansa su nuevo gama de vinos La Alquería, todos de garnacha tintorera){kind=link}