Juan Fuente Rus. Portavoz de la sectorial de vinos en Cooperativas Agroalimentarias de CLM
ENTRE LUCES Y SOMBRAS
Todos sabemos que el vino es uno de los productos alimentarios que más legislación tienen en su proceso de producción, elaboración e incluso para su venta. No hay paso que se realice, desde la plantación de la viña hasta que alguien se lo bebe en su casa, en un bar o en un restaurante, que no esté legislado; formas y maneras de cultivar, de elaborar en la bodega y de etiquetar en el formato que sea para su consumo final.
Es cierto que, durante muchos años, y sigue siendo así, tiene diferentes subvenciones que ayudan a viticultores, bodegas y comercializadores a que el vino llegue al consumidor con precios asequibles para hacer de él una bebida popular. Tan popular que forma parte de nuestra cultura y de nuestra gastronomía, en definitiva, de nuestras formas y maneras de vivir.
El vino es una bebida alcohólica fermentada de graduación media baja que contiene hasta 600 componentes que aportan a la nutrición complementos importantes para nuestro organismo. Ha sido muy importante en la alimentación a lo largo de la historia y es un elemento fundamental de nuestra dieta mediterránea. Esta dieta que nos hace ser de los más longevos del mundo, además de darnos placer y energía para una vida sana, equilibrada y, por qué no, feliz.
Actividad económica
Además, proyecta una importante actividad económica y por lo tanto social y cultural que a los países productores les hace mantener una actividad rural impensable con otros cultivos. Donde hay viña hay vida.
Ahora nos llegan los tambores de guerra en forma de salud y bienestar para nuestra sociedad donde, para algunos, el vino es un problema. Donde el vino se ha puesto en primera línea de fuego para cargar sobre él problemas de salud que hasta hace muy poco tiempo era impensable solamente mencionarlos. Tenemos un problema que poco a poco va calando en las instituciones de la Unión Europea que intenta legislar para limitar el consumo en forma de medidas contra el alcoholismo y otros problemas de salud derivados del consumo inadecuado de bebidas alcohólicas.
Lobbies
Los lobbies del sector, fuertemente representados en las instituciones europeas, intentan mantener el status quo, pero cada día la presión es más fuerte y más complicada de forma que en poco tiempo la ciudadanía dará por buena estas acometidas legislativas. Un país, Irlanda, ya ha dado el paso, sin consenso de la Unión, para legislar en su territorio en contra del consumo de vino obligando a etiquetar con menciones a los problemas de salud que supuestamente tiene el vino sobre el consumidor.
Desde Cooperativas Agroalimentarias de CLM y concretamente desde la sectorial de vinos no podemos estar más en desacuerdo sobre esta medida. No por la importancia del mercado irlandés para nuestros vinos sino por el precedente que crea en los órganos legislativos de la Unión Europea. Esto es una puñalada para nuestros vinos, para su importancia económica y para su importancia social y gastronómica.
Aviso a navegantes
Esto es un serio aviso a navegantes y un punto de inflexión en los acontecimientos que nos llegarán a corto plazo. Deberemos estar atentos y tomar las medidas de presión necesarias para mantener nuestro sector vivo y con garantías de futuro.
