El Monasterio de Uclés ha acogido recientemente las Jornadas Técnicas de Sostenibilidad de la DO Uclés con las que, desde hace 7 ediciones, esta denominación de origen pionera en medir la huella de carbono y referente en materia de sostenibilidad ayuda, desde diferentes perspectivas, a ser sostenibles.
Las jornadas, moderadas por la gerente de la DO Uclés Lola Núñez Pinto, fueron inauguradas por Francisco Javier Maté Caballero, subdirector general de Control de la Calidad Alimentaria y de Laboratorios Alimentarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y con la presencia de Joaquín Cuadrado Ortiz, delegado provincial de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural en Cuenca, para su clausura.
Bajo el lema “Desde el viñedo hasta el consumidor”, la DO Uclés quiso transmitir el mensaje de que ser sostenible ya no es una simple opción, es una necesidad y que no solo se ciñe al vino propiamente dicho, sino en la que figuran todos los actores del proceso. Una necesidad que, en numerosas ocasiones, no se sabe cómo abordar.
Por eso, y en un momento clave como el actual en el que de cambio se ha pasado a emergencia climática, la DO Uclés ha apostado por tratar, de una manera sencilla y desde las bases, cómo ser sostenible en el mundo del vino.
Un centenar de profesionales asistieron a sus VII Jornadas Técnicas de Sostenibilidad
Las jornadas comenzaron con una ponencia sobre cómo se ha articulado el definitivo Pacto de París en Glasgow. Para ello contó con Elvira Carles Brecolí, directora de la Fundación Empresa y Clima, presente en las negociaciones del clima y que explicó a los asistentes, de una manera sencilla y al tiempo precisa, cómo se ha llegado finalmente al articulado del Pacto de París y todo lo que supondrá para la humanidad.
La segunda ponencia corrió a cargo de Helena Fernández Castro, directora de sostenibilidad de Isemaren, quien habló de la brecha existente entre los compromisos acordados por las empresas y la correcta implantación de medidas sostenibles y cuantificables en las mismas. No es el caso de la DO Uclés, pionera en contar con 3 bodegas certificadas como Wineries For Climate Protection, que ha conseguido reducir en un 14% las emisiones de CO2 por litro embotellado, un 15% la media de consumo de agua y el 100% de sus residuos valorizados.
Enrique Macías Gómez, director de Viticultura de Tempos Vega Sicilia, fue el encargado de desvelar cómo se gestiona medioambientalmente esta empresa. Macías se centró especialmente en cómo se ha apostado en la finca por mejorar la eficiencia en la absorción de CO2, aumentando su biomasa mediante lo que se conoce como “silvicultura”. Además, estudian la recuperación de variedades locales “olvidadas” muy interesantes de cara a enfrentarse, por ejemplo, al cambio climático.
Uno de los grandes abandonados en el tema de la sostenibilidad es el suelo, ya que ha sido maltratado sistemáticamente, perdiendo biodiversidad y siendo dañado, sobre todo en las preplantaciones, sin pensar en las consecuencias. El Dr. José Enrique Garzón Jimeno, director del Instituto de Investigación de la Viña y el Vino de la Universidad de León expuso los grandes errores que se cometen destruyendo este ecosistema, que va a ser muy difícil de recuperar.
Desde las viñas y sus suelos, se pasa hasta las bodegas. Justo Banegas, director general de Alfatec Ingeniería y Consultoría, expuso, mostrando datos concretos, cómo se debe proyectar una bodega desde la visión de una sostenibilidad “360 grados”, basada en la eficiencia energética, económica y operativa.
Carlos de Jesús, director de Comunicación de Amorim Cork, cerró las jornadas transmitiendo la importancia de la industria del corcho para la sostenibilidad de la industria del vino, ya que además de ser el corcho ecológico, renovable y sostenible, las dehesas de alcornocales juegan un papel crucial en el equilibrio del planeta y en concreto frenando la desertificación.
Con estas jornadas la DO Uclés mantiene así vivo su compromiso con la sostenibilidad, ayudando a la formación y divulgación en estas materias, en una apuesta férrea por un futuro en el que el desarrollo sostenible es esencial y en el que el mundo rural tiene mucho que decir.
La DO Uclés fue creada en 2006 y se sitúa en la meseta sur de la península ibérica, entre las provincias de Cuenca y Toledo. Comprende unas 1.770 hectáreas de viñedo y es la denominación de origen situada a mayor altitud de Castilla- La Mancha. Su férreo compromiso por la sostenibilidad la ha hecho ser la primera denominación de origen en España que mide la huella de carbono y sus bodegas están en el exclusivo grupo de las ocho primeras bodegas españolas que obtuvieron la certificación Wineries for Climate Protection (WfCP), única certificación específica para el sector del vino en materia de sostenibilidad ambiental.
